Existen dos tipo de organizaciones a la hora de entender la tecnología: las ludditas y las tecnófilas. Las ludditas ven la tecnológica como un gran problema, no la entienden o no quieren entenderla. Por el contrario, las tecnófilas ven la tecnología como la solución para todos sus males.
(...)
Una organización inteligente es capaz de determinar qué tecnologías necesita y de usarlas eficientemente para ejecutar su estrategia. Cultivar la inteligencia tecnológica no implica gastar, sin sentido, enormes cantidades de dinero (y tiempo) en tecnología; significa invertir de forma selectiva y usar inteligentemente determinadas tecnologías, que permitan diferenciarse de los competidores y crear ventajas competitivas.
La inteligencia tecnológica no se rige por modas, sino por necesidades. No es más inteligente la empresa que dispone de más tecnologías, sino aquella que usa extraordinariamente bien las que realmente aportan valor a su modelo de negocio.
Organizaciones Idiotas Vs. Organizaciones Inteligentes
(Tratado sobre las inteligencias organizativas y sus fracasos)
Juan Carrión Maroto 2007
Pearson Educación (PT Prentice Hall)
(Tratado sobre las inteligencias organizativas y sus fracasos)
Juan Carrión Maroto 2007
Pearson Educación (PT Prentice Hall)
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