dilluns, de juliol 23, 2007

Irma la dulce, Billy Wilder

Billy Wilder quizás sea dios. Lo que si es, es un gran director de cine. Con una visión del mundo cómico inigualable. En particular, "Con faldas y a lo loco" es de lo mejor de lo mejor que he visto. Y "Avanti! o Que Ocurrió entre tu padre y mi madre" no está nada mal.

Con "Irma la Dulce" tengo más problemas. Seguramente porque yo vivo el sexo de una forma demasiado conservadora para mi edad y estado, pero banalizar la prostitución y el proxenetismo en una comedia es algo que, no sé por qué, me pone nervioso. Y cuando estas nervioso te ries de nervios no porque realmente te haga gracia. De todas formas supongo que a los Americanos no les haria gracia la misma historia en una dulce chica americana, por eso tuvieron que situar la historia en París. La trama, sin duda, es completamente inverosímil... Y ahí radica la gran magia Wilder... En saber sacarse con un estilazo grandes ases de la manga... La escapada de la cárcel. La aparición de Lord X. El personaje en sí del barman (sin duda impresionante). El perro alcoholico. La escena del registro de la casa de Irma con todos los policias. Grandes ases.

Aún así, el resultado és bueno. Casi muy bueno según mi criterio claro. Una bonita historia de celos y amor (en ese orden) en la que un hombre enamorado se desvive para apartar de su "disoluta" vida a la mujer que ama, sin que ella ni su entorno se enteren, para así poder mantener su orgullo intacto.

Una película entretenida de 2 horas y media (¿quien dijo que antes el cine duraba solo una hora media?), que se deja ver.

A nivel de actores, Lemmon sobreactua un poco en el papel de "Francés" pero lo borda en su otro papel. Y Shirley Maclaine es encantadora... Guapísima y realmente, junto al barman, lo mejor de la película.

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